El origen del conflicto se remonta a 2022, cuando dicha plaza fue incluida en el proceso de estabilización de empleo temporal amparado por la Ley 20/2021. 

Sin embargo, el hecho de que el puesto se ha venido desempeñando mediante contrato de alta dirección indefinido desde 2005, contraviene el espíritu de la ley de estabilización, pensada para corregir abusos en la contratación temporal.

Además, según los estatutos de los consorcios, el cargo de gerente depende directamente de sus órganos de gobierno, por lo que la Diputación no está obligada a organizar proceso selectivo alguno para cubrir la plaza, de ahí que se suspendiera la convocatoria a finales de 2024.

En un principio, la Diputación optó por revisar de oficio la resolución referida a la lista de admitidos y excluidos en el proceso selectivo, si bien el Consejo Consultivo de Castilla y León advirtió que lo que debía anularse era la convocatoria de la plaza.

Para dar cumplimiento a lo expresado por el secretario general y el Consejo Consultivo, la Diputación acordó en el pleno de julio iniciar el procedimiento para la revisión de oficio, esto es, la anulación, de la convocatoria de la plaza de gerente.

Además, como paso previo, la Diputación también se vio obligada en ese mismo pleno a acordar el desistimiento de la revisión de oficio que se aprobó para anular el listado de admitidos y excluidos en el proceso selectivo, puesto que es un trámite posterior a la convocatoria de la plaza que ahora se pretende dejar sin efecto.

Tanto la revisión de oficio de la convocatoria de la plaza como el desistimiento de la revisión de oficio del listado de admitidos y excluidos se han publicado ahora en el Boletín Oficial de la Provincia.