Contratos como la sustitución del césped del campo de fútbol anexo en Sancti Spiritu por 250.000 euros, la revitalización del polígono industrial de las hervencias por dos millones de euros -cofinanciados entre la Junta de Castilla y León y el Consistorio con un millón de euros cada uno-, el plan Asfalto por cerca de 800.000 euros, la renovación de las gradas de las pistas de atletismo por más de 300.000 euros, o las actividades del programa de ocio alternativo Kedada 3.0 por importe superior a los 100.000 euros. 

Pero también el contrato del transporte urbano colectivo de viajeros por 3 millones de euros con carácter anual que se estima que se licite en el mes de octubre. Cabe recordar que este contrato supone actualmente un coste de 2,5 millones de euros para las arcas municipales y se encuentra prorrogado desde 2020. 

Además, en las últimas semanas se ha solicitado que este transporte se extienda hasta el polígono de Vicolozano para dar servicio a los trabajadores de este entorno, tras haber sido retirado en 2013 ante la falta de demanda. Una cuestión que el Ayuntamiento se comprometió a estudiar de cara a este nuevo pliego de transporte urbano colectivo. 

“Hay una mesa de trabajo, de movilidad, de transporte y es en el seno de esa mesa donde se va a tener que ir desarrollando el grueso y el cuerpo de ese pliego”, ha manifestado el portavoz del equipo de Gobierno, José Ramón Budiño, después de la Junta de Gobierno Local celebrada este jueves. 

Una reunión, celebrada este jueves, donde también se ha dado el visto bueno a la propuesta para adquirir un sistema completo de baterías de alto voltaje para tres autobuses Volvo 7900 híbridos del servicio de transporte público de la ciudad de Ávila, por un presupuesto máximo de licitación de 145.000 euros, más IVA.