Ya desde el mediodía, el Real Ilustre Patronato de la Santa Vera Cruz no tenía buenas esperanzas para la salida, después del traslado del Cristo de los Ajusticiados desde la ermita del Humilladero hasta la Catedral que, aunque ha salvado el viento, ha llevado a la Junta directiva a plantear la decisión de no salir. 

Finalmente, ante los avisos de la Agencia Estatal de Meteorología que han establecido nivel amarillo por lluvias en Ávila, la Junta de Gobierno de la entidad penitencial de la cofradía ha tomado la decisión en una sesión extraordinaria, pasadas las 18 horas, de suspender la procesión de los Pasos para no correr riesgos. A las 18,40 ha comenzado a llover con fuerza después de que no hubiera caído nada en toda la jornada. 

Una decisión difícil tras un año de espera, más cuando uno de los pasos, La Santa Cena (1904, Manuel Sánchez Araciel) iba a lucir algo distinta después de haber renovado el suelo y restaurado la mesa que compone el paso. 

Si bien desde la organización se ha acordado llevar a cabo una oración en el interior de la catedral, a las 20.30 horas, destinada solo para los hermanos del patronato, sin que las puertas de la Catedral vayan a abrirse al público, de la misma manera que las imágenes tampoco se exhibirán, como sí se ha hecho en las anteriores procesiones que han tenido que suspenderse como consecuencia de las inclemencias meteorológicas, como la del Silencio, la del Miserere, la del Cristo de las Batallas, la de Madrugada y la de Medinaceli. 

Un día más, el tiempo le gana el pulso a la Semana Santa este 2024 y ha dejado a los 12 anderos que tenían previsto llevar a hombros a La Santa Cruz sin procesionar por el recorrido establecido, junto a los otros ocho pasos que iban a ir acompañados de 400 nazarenos de la hermandad. 

Y así es como ha discurrido este breve Jueves Santo de procesión en el que la borrasca Nelson ha robado el protagonismo a una de las más antigua de las penitenciales de Ávila.