Según el Gobierno autonómico, los medios del Plan de Protección Civil ante Emergencias por Incendios Forestales en Castilla y León (INFOCAL) y del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO), han trabajado durante las últimas horas para tratar de "controlar el perímetro".

En esta línea, en las próximas horas está previsto que los bulldozers traten de "asegurar el perímetro", a la vez que los medios aéreos reincorporados a primera hora del día "operarán en caso de reproducciones".

En total, durante la pasada madrugada han trabajado en la zona un total de 164 efectivos en este fuego que la Administración autonómica ha declarado de nivel 2 de peligrosidad por el posible riesgo de personas y bienes, mientras que mantiene el nivel 1 para el de Cebreros, tras rebajarlo el domingo.

Junto a una docena de medios aéreos, el domingo intervinieron en los trabajos para sofocar las llamas un técnico; tres agentes medioambientales; seis cuadrillas helitransportadas; tres brigadas de refuerzo de incendios Forestales (BRIF); tres cuadrillas terrestres y 13 autobombas, además de la Unidad Militar de Emergencia (UME).

Todos estos medios terrestres y aéreos impidieron que las llamas alcanzaran El Barraco, aunque según el delegado territorial de la Junta, José Francisco Hernández, estuvieron "muy cerca de llegar al casco urbano".

El director técnico de Extinción, Rodrigo Gandía, señaló que este último incendio surgió de una posible "reactivación" del que el sábado se produjo en la zona de forma intencionada, mientras que Hernández apuntó la posibilidad de que las llamas surgieran de forma intencionada "a pocos metros" del lugar en el que comenzaron el día anterior.