El evento ha comenzado al ritmo de dulzaina y tamboril, creando un ambiente festivo que ha dado paso a un mercadillo artesanal en el que han convivido labores de ganchillo con dulces árabes, en un espacio compartido de respeto e intercambio.

Entre las actividades ha brillado la actuación del grupo de danza Herreros de Suso, que ha ofrecido una exhibición de jotas aplaudida por el público. Como broche final, Meraki Duo ha aportado un toque cosmopolita al evento con un repertorio de música de influencia irlandesa, consolidando el carácter intercultural del encuentro.

Uno de los momentos más emotivos ha sido la entrega de la recaudación de la Color Run de Disfraces, celebrada el 27 de septiembre, cuyos fondos se han destinado a la Asociación de Personas Sordas de Ávila. Una representante de la entidad ha podido experimentar la música colocando las manos sobre el violonchelo para sentir la vibración de la melodía. La jornada ha finalizado con una degustación de cocido morañego, reuniendo a vecinos y visitantes en torno a una tradición gastronómica.