Tras la muerte el sábado de un escalador al caer desde 150 metros, la llamada de auxilio fue recibida por la sala del 1-1-2 de Castilla y León a las 9,30 horas. El aviso solicitaba asistencia urgente para una mujer herida desde la noche anterior en una zona de alta montaña. El centro de emergencias estableció una multiconferencia con Emergencias Sanitarias-Sacyl, que realizó una primera valoración médica telefónica e indicó al alertante las pautas de actuación hasta la llegada de los equipos de rescate.

El incidente fue comunicado al Centro Coordinador de Emergencias de la Junta de Castilla y León, que movilizó un helicóptero de rescate con dos especialistas, uno de ellos enfermera, al tiempo que se activaban una ambulancia de soporte vital básico y se avisaba a la Guardia Civil.

El helicóptero localizó a la primera afectada junto a la Laguna de la Majalaescoba. La aeronave logró apoyar uno de sus patines en el terreno, permitiendo el descenso de los rescatadores, quienes inmovilizaron la pierna de la mujer con una férula antes de izarla al aparato.

Durante la atención, los rescatadores fueron requeridos para asistir a otra persona con una lesión similar en las inmediaciones. Se trataba de un hombre que formaba parte de otro grupo de montaña y que había resultado herido en el tobillo en la salida del Circo de las Cinco Lagunas. Tras sobrevolar la zona, el helicóptero lo localizó y repitió la maniobra de aterrizaje parcial para evacuarlo.

Ambos heridos fueron trasladados al helipuerto de Hoyos del Espino, donde personal sanitario les prestó una primera atención antes de derivarlos al Centro de Salud de Navarredonda de Gredos. Posteriormente, fueron evacuados al Complejo Asistencial de Ávila para continuar con su tratamiento.