Con una de las tres compuertas abiertas, la catarata de agua vierte con fuerza de un embalse cuyo nivel sigue a la baja y se encontraba en la tarde del jueves cerca del 86%, después de superar el 90%.

Según los avisos hidrológicos declarados en la demarcación del Tajo y los episodios de desembalses de las presas de titularidad pública, el embalse del Burguillo se encuentra “desembalsando con caudales significativos” a razón de 183 metros cúbicos por segundo.

Esta circunstancia deja imágenes espectaculares en la zona, en un 'escenario 0' o de control de la seguridad, ya que las condiciones existentes y las previsiones aconsejan una intensificación de la vigilancia y el control de la presa, sin que se requiera la puesta en práctica de medidas de intervención para la reducción del riesgo.

En el Burguillo desembocan las aguas procedentes del Alberche, que desde el pasado fin de semana ha experimentado una crecida considerable debido al paso de la borrasca Jana, que ha dejado una gran pluviosidad, con nieve en las sierras más próximas.

Ahora, una vez superado el paso de Jana, llega el turno de Konrad, que se prevé que, además de lluvia y nieve, deje temperaturas más bajas, que se pueden traducir en hielo en las cumbres. Las localidades vecinas, como Cebreros y El Tiemblo, siguen con expectación la evolución del embalse.

Por ello, la CHT informa de que el desembalse actual se realiza en previsión de que en los próximos días continúen unas lluvias, incrementando así su “capacidad de resguardo”.