Carlos García ha criticado a Jesús Manuel Sánchez Cabrera, pues conoce “perfectamente” cómo funciona la entidad, “porque fue presidente del Consorcio y, si no lo saben los abulenses, dejó una deuda de más de tres millones de euros que vamos a acabar de pagar en 2025, gracias a su gestión”.

Por Ávila, el partido de Sánchez Cabrera, votó en el consorcio, al igual que el PP, que tiene mayoría absoluta, a favor de la subida de la tasa de reciclado a los vecinos de la capital. Sin embargo, el alcalde ha criticado que los populares apoyasen esa subida, pero no votasen a favor de la subida en el Ayuntamiento.

Ante esto, García ha destacado que fue el Consistorio el que solicitó el incremento de la tasa de reciclado, para “adecuarse” a la ordenanza fiscal por la prestación del servicio de recogida y transporte de residuos del Ayuntamiento. Cabe recordar que con la nueva subida, el Consorcio actualiza la tasa de reciclaje por tercer año consecutivo. 

Y cree que el alcalde quiere responsabilizar a alguien de la subida de impuestos: “Lo que digo claramente al señor Cabrera es que las mentiras al final tienen muy poco recorrido, pero si él quiere buscar un culpable en la Diputación o en el Consorcio Provincial de Residuos de la Zona Norte por su mala gestión y por su incapacidad, y al hecho de que someta a los abulenses a un nuevo hachazo fiscal, es su problema”.

“No es el problema de la Diputación ni del consorcio ni de su presidente, que está bastante tranquilo”, ha dicho, y le ha recomendado que recupere la tasa de reciclado, ahora cedida a la Diputación, para que la cobre directamente el Ayuntamiento, porque “es su competencia, y haga lo que él crea conveniente si no quiere aplicar la tasa de reciclaje y el coste del servicio”.

“La Diputación aceptó tramitar la tasa, pero de la misma manera que aceptó hacerlo, puede llegar a un acuerdo” para que se haga cargo el Ayuntamiento. “Si va a generar problemas y encima va a utilizar la mentira para trasladársela a los abulenses y culpabilizar a otras administraciones de su incompetencia, pues es su problema, no el problema de los demás”, ha añadido. “Y esos problemas, ¿sabe quién los paga? Los abulenses”, ha concluido.