El regidor de esta localidad ha respondido al grupo socialista en el Consistorio de este municipio, cuya portavoz, Carolina Martín, denunció que la bomba pesada rural (BPR), cedida por la Diputación el 22 de diciembre, no pudo intervenir porque “no tenía agua” y “cuando fueron a arrancarlo, estaba sin batería”, ya que “se había descargado porque está en la calle aparcado porque no entra por la puerta de la nave recientemente cambiada la puerta para ello”.

Tras estas declaraciones, Padró ha explicado a Onda Cero que el uso de ese camión está restringido a casos excepcionales, ya que “en principio es para incendios forestales en época estival, que es cuando se contrata a gente para conducirlo”; sin embargo, ha dicho que el día en el que se declaró el fuego el camión se encontraba "en modo invierno”.

En este sentido, ha señalado que estaba “totalmente vacío de agua porque si no, se congela y puede dañar a los conductos y tuberías y por eso estaba vacío”. Además, ha señalado que tenía "las baterías desconectadas, que es como se guarda el camión, para evitar que se descarguen, pero con el nulo uso que tiene en invierno, evidentemente estaban bajas de potencia".

Según los socialistas, todo “se quedó todo en un gran susto, gracias a la colaboración de los vecinos y vecinas del pueblo”, junto al trabajo de los voluntarios de Protección Civil, los bomberos voluntarios de La Adrada y Sotillo de la Adrada y los camiones de bomberos de Ávila y San Martin de Valdeiglesias, mientras “el camión de Gavilanes no pudo ni moverse".