En este sentido, creen que no se ha hecho caso al informe de Europarc (el principal foro profesional de las áreas protegidas en España) emitido en marzo, donde se califica como “inviable” mantener el actual sistema de gestión, y destacan que hay “18 personas cobrando y regulando el tráfico y ninguna vigilando el interior del bosque”.

“Es muy difícil creer –apuntan- que se toman medidas cuyo objetivo principal sea proteger el bosque cuando nos encontramos los fines de semana de otoño con hasta 18 personas (entre Policía Local, miembros de Protección Civil y empleados del Ayuntamiento) para controlar y velar por el orden en el acceso de vehículos y para cobrar la tasa de subida, y sin embargo, ni una sola persona vigilando dentro del bosque, y por supuesto, nadie en ningún sitio el resto del año”.

Sobre el futuro sistema de cita previa para los vehículos, la plataforma lamenta que no se aborde la gestión global del bosque durante todo el año, y que además, los esfuerzos no se dirijan al verdadero problema, ya que “el objetivo es frenar la acumulación de coches y que dejen de verse las interminables colas a la entrada del pueblo”, dado que es “una medida para mejorar el tráfico y la seguridad, no para conservar el bosque”.

Apuntan que otra cosa sería una cita previa controlando y regulando las personas que acceden al bosque y la frecuencia de paso de los visitantes a lo largo de todo el año, que es lo que recomienda el informe de Europarc, que cifra la capacidad de acogida del castañar entre 300 y 360 visitantes diarios, dependiendo de la época del año, a razón de 30 personas a la hora cuando, por ejemplo, el 29 de octubre en ocho horas accedieron al bosque por la entrada principal 1.049 personas.

Aparcamiento en una pradera

La plataforma, que pide control todo el año y no solo en otoño, critica que una pradera cercana a la entrada del bosque se haya convertido en un nuevo aparcamiento, ampliándolo en alrededor de 80 plazas, lo que “hace que desaparezca la imagen de aglomeración de coches aparcados en las cunetas que llevamos tantos años viendo, pero que los vehículos esté ahora bien aparcados no quita ápice de presión al bosque, ya que las personas que van en los coches están dentro del castañar”.

Por tanto, creen que las medidas “van orientadas a camuflar o maquillar el problema que existe en El Castañar pero no a intentar atajarlo”.

También consideran que no es cierto que desde el año pasado solo se permitiera el acceso a 100 coches diarios, puesto que los propios datos proporcionados por el Ayuntamiento de El Tiemblo en 2021 llegan a contabilizar “cifras que exceden los 100 coches, la mayor parte de los fines de semana en los que hay control  (solo  ocho o nueve al año), habiendo días con más de 270 vehículos.

Según la plataforma, “descartando errores diarios de conteo, y por supuesto, la intención de mentir, suponemos que al hablar de 100 vehículos diarios, a lo que en realidad se refieren a 100 coches diarios de forma simultánea que, evidentemente, no es lo mismo que 100 coches diarios”. 

Lo que si valoran positivamente es la instalación de la caseta que hará más llevadera la tarea del técnico del parque los aproximadamente 20 días al año que está prevista su presencia, así como el difícil trabajo que desarrollan. “Es encomiable su intento de informar al mayor número de visitantes posible de las normas de visita, aunque debe resultar desalentador que luego nadie vigile en el interior porque estas sean cumplidas”.

También la plataforma advierte que el turismo masivo no es la única amenaza para este frágil ecosistema, sino también el pastoreo incontrolado y determinados trabajos silvícolas incompresibles en una reserva natural.