Los ‘sacrogramas’, del libro de Scala publicado en 2013, han volado desde el arco del Alcázar hacia la plaza de Santa Teresa y hacia el interior del casco histórico en la segunda parte de la acción ‘Ávila La Vía’.

Ha sido una de las formas de cerrar el festival, que ha concluido ante el monumento de San Juan de la Cruz. Tras escoger el silencio como discurso de proclamación poética, en nombre de todos los poetas presente y todo aquel que sienta suya la idea, la plaza, denominada Corral de Campanas, ha sido proclamada como ‘plaza de San Juan De La Cruz’. Para simbolizar el acto se cubrieron los indicadores de la plaza con carteles efímeros con el nombre del poeta de Fontiveros.

Según Nuria Herrera, responsable del festival, esta nueva edición termina “consolidada, tras un fin de semana de mística, poesía, calle y patrimonio en perfecta comunión y belleza, con una participación y afluencia muy alta y, con buen sabor de letra y esencia propia”.

Irrepetibles

Las actividades han sido “expresamente diseñadas para la ocasión, irrepetibles, a las que los ciudadanos se han acercado con gozo y gratitud”, como en la primera jornada, cuando “volvimos a comprobar que la poesía no necesita un espacio aparte ni un especial designio para que su poder haga su acto en las mentes y los corazones”, ya que “en las paradas y líneas urbanas los viajeros volvieron a agradecer la exactitud de la palabra”.

El sábado el festival contó un “paseo íntimo y revelador por las huellas espirituales de Ávila de la mano de Eduardo Scala y su propia visión de esta ciudad que le acoge desde hace una década”, y el espectáculo poético de Juan Carlos Mestre.

También numerosos vates salieron a las calles, como Palo Urizal y Javier Eye improvisando poemas personalizados para los viandantes: Vera Herrero vestida de bucanera abordando a los transeúntes para hacer rimas: un susurrador de versos (Santi Domínguez), que hizo cambiar y parar de rumbo a más de uno para escuchar poesía al otro lado del tubo: y Anastasia Rollón improvisó dibujos con presencia de letras como retrato pictórico-poético de quien lo solicitaba bajo el lema “con tu esencia y la poesía hago magia”.

Mientras que Laura Gracia de Lucas, premio Rey David de poesía bíblica, María José Álvarez, Sonsoles Soto, Daniel Zazo, Isma Inthirath, Fran W Shamba y Anastasia Rollón compartieron un recital poético.