Con el mensaje “dona médula, dona vida”, el mural invita a la sociedad abulense a que se hagan trasplantes de médula ósea, ya que en muchas ocasiones supone la última oportunidad terapéutica para algunas personas que sufren algunas leucemias u otras enfermedades hematológicas.

El mural supone “un homenaje a todos los imparables”, tal y como ha explicado Rubín de Celix. Desde el viernes y hasta el domingo, estos artistas abulenses plasman su obra, impulsada en esta ocasión por Javier Dávila, una persona que ha sido trasplantada.

Aunque es pronto para ver el final de la obra, ya que los artistas están empezando a trabajar en ella. Rubín de Celix ha detallado que se trata de un árbol seco cortado, nace una ramificación “para simbolizar la vida”. “Es el concepto con el que hemos jugado, porque realmente es lo que significa un trasplante: a raíz de una vida, se salva otra”, apunta la artista.

En el mismo paredón de la avenida Juan Pablo II, Rubín de Celix cuenta con una obra dedicada a la lactancia y Ana García y Diego Vallejo aprovecharon el Día de la Mujer para pintar en él a tres mujeres artistas con un pequeño vínculo con la ciudad de Ávila: María Moreno, Isabel Quintanilla y Amalia Avia. Rubín de Celix ha bromeado con la idea de dejar un espacio en blanco para poder pintar otro mural en el futuro.