Aunque por el momento no se puede hablar de acuerdo porque ninguna de las partes lo ha anunciado, el trayecto a Roma puede haber servido para desbloquear una negociación que parecía enquistada desde que Carlos García se levantara de la última reunión entre ambas partes, cuando, según Jesús Manuel Sánchez Cabrera, la cuantía inicial de 1,6 millones de euros que solicitaba por el Ayuntamiento, había sido rebajada hasta 1,2 millones.

Tras salir de la audiencia papal lo ha comentado de manera distendida ante los medios españoles destacados en el Vaticano el obispo de Ávila, José María Gil Tamayo, quien al señalar que el pontífice "ha hablado mucho de negociar, negociar, negociar". "Y como anécdota le he dicho que han arreglado el problema de los bomberos en la provincia, una cuestión últimamente en candelero", ha explicado a los periodistas, añadiendo que "han negociado, se ve que bajo el amparo del papa".

A falta de saber si está arreglado, lo cierto es que el viaje, dos horas y media de avión de ida y las mismas de vuelta, puede haber servido para que los dos protagonistas hayan hablado para tratar de desatascar unas negociaciones que, hasta ahora, parecían haber encallado sin visos de un acuerdo que podría producirse antes de que expire el 2020 y el convenio quede sin efecto.

La oferta de la Diputación consistía en incrementar los 400.000 euros anuales en 50.000 cada año, hasta alcanzar los 600.000 euros al año dentro de cuatro ejercicios. A ello se sumarían otros 400.000 euros para dotar al Parque de Bomberos de la capital de un nuevo vehículo.