La tía María falleció el martes rodeada de su familia en su casa de Navaluenga, que este miércoles la ha despedido recordando su "admirada y querida" figura. Ya reposa en el Cementerio Municipal junto a su marido, Faustino Yuste, y dos de sus cinco hijos.

El alcalde del pueblo, Armando García, ha tenido palabras de recuerdo y cariño hacia esta mujer a la que ha definido como una "buena persona".

Aunque nacida el 15 de febrero de 1910 en la vecina localidad de San Juan de la Nava, la tía María se trasladó hasta Navaluenga tras casarse con su marido, al que perdió con 82 años.

Precisamente el pasado 15 de febrero, el pueblo de Navaluenga le rindió un homenaje con motivo de su 110 cumpleaños a las puertas de su casa, donde María Varas Hernández se atrevió a cantar una de las coplas que aún recordaba de su época juvenil.

La tía María era la segunda mujer más longeva de la provincia de Ávila, la cuarta de Castilla y León y la de mayor edad de Navaluenga, una localidad que cuenta en su censo con más de una decena de personas centenarias-