Los responsables de ambos sindicatos han criticado a Confae, que acordó el acuerdo pero que horas antes se descolgó y rechazo rubricarlo. La noche anterior al 23 de mayo alejaron que no las medidas fiscales planteadas eran insuficientes y que figuraban planteamientos que se no se habían acordado.

El secretario provincial de UGT, Javier García, ha dicho que la marcha atrás de Confae se produjo con “nocturnidad y deslealtad”, por no haberles llamado “personalmente para comunicar una decisión” que había pactado y no acudir a la firma.

Dos días antes el documento “estaba consensuado por el Ayuntamiento, Confae y los dos sindicatos mayoritarios”. Ante eso “el Ayuntamiento y los dos sindicatos decidimos firmarlo porque aunque no sea el primer acuerdo del Diálogo Social, no pierde importancia”, ya que “recoge medidas para los sectores más afectados por la crisis”.

García ha dicho no entender a Confae, que se ha quejado de quedarse fuera de los programas municipales, porque luego quiere “ser parte activa” del acuerdo: la patronal “ha renunciado voluntariamente al no firmar el acuerdo y, paradójicamente, manifiestan que les produce malestar, no es de recibo no suscribir el acuerdo y luego querer ser parte activa del mismo después de haberlo rechazado. No han entendido el concepto de corresponsabilidad”.

Sin una pata

Sin la organización empresarial en el acuerdo, “uno de los proyectos para la reactivación económica del que se iba a encargar la patronal, lo tendrá que hacer el Ayuntamiento, mientras que UGT y CCOO nos encargaremos de la pata de la información y la formación”.

“Todavía hoy seguimos sin entender cómo Confae tomó esa decisión tan errónea de dinamitar un acuerdo del que son partícipes y que se había construido con tanto tiempo y tanto esfuerzo, y con un margen absoluto de confianza”, ha expresado el secretario provincial de CCOO.

García Barroso dice que Confae se ha autoexcluido en lo que ha calificado de “salida de tono”. De todos modos ha pedido que reconsideren la decisión: “no es lo mismo un acuerdo sin Confae, porque pierde una parte importante”, ya que “una propuesta común es lo más saludable para el futuro de nuestra ciudad”.