López Casillas ha acusado al coordinador José Jiménez, y al secretario de Organización, Bruno Coca: “no están por la labor hablar y debatir, sino de imponer", ha dicho, a la vez que les ha acusado de “desleales”.

Según el edil, a los miembros de la dirección provincial “les molesta que su ausencia de labor política se haga más patente” con la actividad política del grupo municipal, ha argumentado, a la vez que ha asegurado su trabajo es mayor que la de la dirección provincial.

También ha dicho que mientras la Asamblea Local de Ávila pretende abrir un debate interno para analizar la situación política de la capital, preparar el programa electoral y observar posibles confluencias, la Coordinadora Provincial apoya la confluencia "pase lo que pase".

Desde la dirección provincial apoyan unir fuerzas con otras formaciones, "incluso si esa confluencia se lleva por delante el proyecto político de una organización de 30 años de lucha en esta ciudad", porque -ha dicho López Casillas- “les importa un bledo”.

Adscripción de afiliados

La chispa que ha motivado este enfrentamiento deriva de la intención de adscribir afiliados de la provincia a la capital con la intención de aumentar el número de militantes y que, según López Casillas, salga adelante la idea de ir con otras fuerzas a las elecciones.

La Asamblea Local rechazó la admisión de 16 afiliados de cinco localidades de la provincia que carecían de agrupación, por lo que la Coordinadora Provincial decidió intervenir tanto la asamblea local como el grupo municipal. Esta decisión será impugnada por la asamblea de la capital.

Su responsable ha acusado a la Coordinadora Provincial de adoptar las decisiones de intervenir la asamblea y el grupo municipal "por su cuenta y riesgo", sin que se haya esperado a la resolución regional sobre las decisiones anuladas, al acusarles de “incumplir los estatutos" y de “sobrepasar sus funciones".

López Casillas y la secretaria de Organización de la asamblea de la capital, Montserrat Sánchez, han explicado que lo que quieren es "fomentar" la constitución de asambleas locales y comarcales, siempre que cuenten con un número superior a los cinco miembros. Por eso no admitieron a los procedentes de El Tiemblo: “no tiene ningún sentido que en un municipio con siete afiliados y donde hay un concejal, vengan a debatir a la asamblea de Ávila".

Comité de Garantías

Además, el responsable de la capital ha advertido que hubo un "defecto de forma" a la hora de que se inscribieran los 16 militantes como miembros de la Asamblea Local de Ávila, si bien ha dicho que debe esperarse a la resolución del Comité de Garantías regional, aunque debía haberse pronunciado en diciembre.

Según López Casillas, ellos se encuentran en una situación de indefensión, porque la Coordinadora Provincial no ha esperado a la resolución regional y “ha pisado el acelerador”, interviniendo al grupo municipal y a la dirección local.

Otras críticas efectuadas por López Casillas han sido las de limitarles el acceso a la sede y no dejarles hablar en el Ayuntamiento, sin su consentimiento, de algunos temas como el Museo del Prado, la sanidad o la memoria histórica porque traspasan el ámbito municipal. “No necesitamos el permiso de nadie” para hacerlo, porque “estamos legitimados” y son parte del programa electoral.