Así lo refleja la última Encuesta de Confianza Empresarial elaborada por la nfederación Abulense de Empresarios (CEOE Ávila), enmarcada en el eje 7 del IV Acuerdo Marco para la Competitividad y la Innovación de Castilla y León 2021-2027.

El estudio evidencia una estabilidad generalizada en las variables clave de negocio. El 56% de las empresas declara haber mantenido sus ventas en los últimos cuatro meses, y un 20% incluso las ha incrementado. En cuanto al empleo, el 49% no ha variado su plantilla y el 72% prevé mantenerla hasta final de año.

Esta estabilidad operativa se produce pese a una presión creciente sobre los costes. El 60% de las empresas ha registrado incrementos en aprovisionamientos de hasta un 20%, y el 57% también en costes laborales. Como resultado, el 51% ha visto reducidos sus márgenes comerciales.

Mano de obra
Uno de los datos más preocupantes que arroja la encuesta es la dificultad para encontrar trabajadores adecuados: el 73% de las empresas afirma tener problemas de contratación, y para el 72% esta carencia de talento impacta directamente en su competitividad o capacidad de crecimiento.

Entre los factores locales que más obstaculizan el desarrollo empresarial destacan la escasez de mano de obra, la despoblación, la carga burocrática, la competencia online y la falta de infraestructuras o suelo industrial en determinados municipios.

El 46% de los empresarios abulenses considera que la situación económica de España empeorará en los próximos meses, mientras que el 50% cree que se mantendrá igual. Sin embargo, esa visión negativa no se traslada necesariamente al ámbito interno: el 58% de las empresas prevé resultados similares a los de 2024 y un 18% mejores. Este contraste refleja una confianza individual que no se extiende al conjunto del panorama económico.

En cuanto a los principales factores de preocupación para el empresariado, destacan la presión fiscal, los costes energéticos, la excesiva regulación, el aumento de los costes laborales, la inestabilidad política y la caída del consumo. Por el contrario, cuestiones como los aranceles con Estados Unidos o la financiación bancaria tienen un impacto más limitado.

Incertidumbre

Solo el 32% de las empresas encuestadas ha realizado inversiones durante este año, centradas principalmente en maquinaria, herramientas, instalaciones o vehículos. Las expectativas para los próximos seis meses son moderadas: predominan la incertidumbre, la búsqueda de nuevos mercados y la mejora de canales digitales como posibles vías de crecimiento.

Para el presidente de CEOE Ávila, Diego Díez, el sondeo “confirma el enorme esfuerzo que están realizando las micro y pequeñas empresas de la provincia para sostener su actividad en un entorno especialmente complejo". En ese sentido, ha asegurado que seguirán “trabajando para reducir barreras y reforzar la competitividad del tejido empresarial abulense".

El perfil de las empresas participantes en la encuesta refleja la composición del tejido productivo abulense. Cerca de un centenar de firmas ha participado, de las cuales el 63% está ubicado en la provincia y el 37% en la capital. Predominan las actividades del sector servicios, seguidas de industria, agroalimentación, comercio y construcción.

Más de la mitad de las empresas cuenta con entre cero y diez trabajadores, y un 35% no tiene empleados. Además, el 77% factura menos de 500.000 euros al año, lo que confirma la prevalencia de la microempresa como motor económico de la provincia.