La iniciativa se desarrolló entre los días 24 y 30 de noviembre, en el marco del calendario de operaciones previstas para 2025 con el objetivo de reforzar la seguridad vial y garantizar el cumplimiento de la normativa vigente en el transporte ligero por carretera.

Durante la campaña fueron controladas un total de 51 furgonetas. Las inspecciones incluyeron la verificación de la documentación tanto del vehículo como del conductor, el cumplimiento de la masa máxima autorizada, el estado general del vehículo y los neumáticos, la correcta estiba y sujeción de la carga, posibles excesos de peso, pruebas de alcohol y drogas a los conductores y el uso adecuado del tacógrafo, entre otros aspectos.

Del total de furgonetas controladas, se han realizado tres denuncias administrativas relacionadas con la ITV. La campaña se enmarca en la estrategia de prevención y vigilancia que impulsa la DGT en colaboración con las policías locales para mejorar la seguridad de los desplazamientos en el entorno urbano y garantizar que los vehículos que circulan reúnan las condiciones técnicas y legales exigidas.