En la diócesis de Ávila, esta jornada destaca que hay 52 misioneros desplegados por el mundo. La delegada diocesana de Misiones, Mercedes Sánchez, ha querido recordar que la misión “no es cosa del pasado, sino una realidad viva que sigue transformando corazones y comunidades en todo el mundo”.

En sus palabras, los misioneros “llevan la buena noticia del Evangelio a todos los rincones de la Tierra, no solo con palabras, sino con obras, acompañando, sirviendo y compartiendo la vida con las personas a las que son enviados”.

La delegada diocesana de Misiones, Mercedes Sánchez, ha querido recordar que la misión “no es cosa del pasado, sino una realidad viva que sigue transformando corazones y comunidades en todo el mundo”. En sus palabras, los misioneros “llevan la buena noticia del Evangelio a todos los rincones de la Tierra, no solo con palabras, sino con obras, acompañando, sirviendo y compartiendo la vida con las personas a las que son enviados”.

Desde la delegación de Misiones insisten en que la presencia de los misioneros tiene un impacto tangible. En muchos de los lugares donde trabajan, “la esperanza se hace carne, porque se promueve la vida, la educación, la justicia, y se construyen escuelas, hospitales o capillas donde parecía que no había ninguna solución”, ha explicado Sánchez.

Vocación con alegría

Según la responsable diocesana, los misioneros viven su vocación “con alegría” y con la certeza de no estar solos: “Son enviados por una Iglesia que reza por ellos y les cuida. Con su testimonio nos enseñan que el amor de Dios cambia la historia del hombre y del mundo”.

El Domund tiene también una dimensión de compromiso económico. En palabras de  Sánchez, “esta jornada nos recuerda que hay más de 1.300 iglesias jóvenes en territorios de misión que dependen de nuestra oración y de nuestra ayuda económica para poder sostener su labor”.

El papa Francisco, destacó, insiste en que “la primera acción misionera es la oración”. A ella se suma una colaboración económica que permite a la Iglesia “estar presente en las diócesis más pobres y en los lugares donde la esperanza comienza a nacer”.

El pasado año, la diócesis de Ávila recaudó 161.740,96 euros destinados a proyectos misioneros. Un esfuerzo que la delegada agradeció “de corazón a todos los párrocos, catequistas y fieles que colaboran con tanta generosidad”. “Ávila es una ciudad generosa, y animo a todos a seguir orando y colaborando con los misioneros”, añadió.

Compromiso

En la actualidad, 52 misioneros abulenses desarrollan su labor en diferentes puntos de América, Asia, Europa y África. Algunos de ellos, ya mayores, han regresado a Ávila, pero mantienen su compromiso: “Siguen sintiéndose misioneros allí donde están, porque quien es misionero lo es hasta el final”, afirma la delegada.

Este año, la celebración del Domund cuenta con un mensaje especial del Papa León, quien ha compartido su testimonio personal como sacerdote y obispo misionero. En un vídeo difundido por la diócesis, el pontífice relata cómo “la fe, la oración y la generosidad de jornadas como esta transforman comunidades enteras”.

Este domingo, todas las parroquias de la diócesis contarán con los tradicionales sobres del Domund para que los fieles puedan realizar sus donativos. Aunque ya no se utilicen las huchas misioneras, desde la delegación subrayan que “la solidaridad no puede desaparecer” “Gracias -concluye Sánchez- porque con vuestra oración y vuestra ayuda, cada cristiano se convierte también en misionero. Y porque, en definitiva, la misión es tarea de todos”.