Los actos, a los que asistieron representantes de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, instituciones locales y Administraciones públicas, comenzó con una eucaristía oficiada por el obispo de Ávila, Jesús Rico García. A continuación, la directora del centro destacó el compromiso diario del personal penitenciario y subrayó el valor de las entidades sociales que ofrecen oportunidades de reeducación y reinserción a las mujeres privadas de libertad.

La medalla de bronce al mérito penitenciario fue entregada al comisario principal de la Policía Nacional en Ávila, Ángel Díaz Arias, y al teniente coronel de la Guardia Civil, Gustavo Dorda Medina. Ambos fueron reconocidos por su “estrecha colaboración con la Administración penitenciaria”.

También se concedieron distinciones por 25 años de servicio a dos funcionarios en activo y cuatro menciones honoríficas a trabajadores jubilados del centro, en agradecimiento a su trayectoria profesional y compromiso con el sistema penitenciario.

Durante su intervención, el subdelegado del Gobierno, Fernando Galeano, subrayó que el Día de la Merced “es más que una jornada festiva, y es también un momento de reconocimiento a todas las personas que forman parte de esta institución, para reconocer el trabajo discreto, exigente y no siempre visible o suficientemente reconocido, que realizan los trabajadores del centro penitenciario”.

Galeano insistió en la importancia del papel que desempeñan estos profesionales en la estructura del Estado de derecho: “Prestan un servicio público esencial, garante de un Estado democrático, donde la ley se cumple, donde los derechos se respetan y donde se trabaja por ofrecer oportunidades de cambio. Gracias a sus trabajadores y entidades colaboradoras”.