Además, se declara "alarma extrema" en una serie de municipios especialmente vulnerables de las provincias de León, Zamora y Palencia, donde se aplicarán medidas extraordinarias de prevención.

La decisión, adoptada por la Consejería de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio, responde a las condiciones meteorológicas extremas que afectan a la Comunidad desde hace semanas. Las previsiones meteorológicas apuntan a una continuidad de la situación adversa, con una vegetación sometida a un grave estrés hídrico y una elevada probabilidad de reproducción de incendios debido al extenso perímetro de los ya registrados. "La ocurrencia de incendios especialmente agresivos genera unas condiciones locales especialmente adversas, que favorecen considerablemente el peligro de nuevos incendios forestales y el riesgo para las personas y bienes, dado el comportamiento extraordinariamente virulento con el que se están desarrollando", señala la resolución.

Esta situación ha llevado a mantener activada desde el 11 de agosto la Situación Operativa 2b conforme al Plan INFOCAL (decreto 6/2025, de 27 de marzo), que contempla escenarios de emergencia por incendios forestales.

Medidas de prevención
Durante los cuatro días de activación de la alerta, estarán prohibidas las siguientes actividades en todos los municipios de Castilla y León: encender fuego en espacios abiertos, incluidas zonas recreativas y de acampada, aunque estén habilitadas; uso de barbacoas en cualquier entorno abierto, empleo de material pirotécnico y lanzamiento de cohetes o artefactos con fuego; y utilización de maquinaria que genere fuego, chispas o descargas eléctricas en el monte y en la franja de 400 metros que lo rodea, salvo en casos de emergencia previamente comunicados.

"Se hace un llamamiento especial a la ciudadanía para que extreme su precaución", indica la Junta, recordando que cualquier imprudencia podría desencadenar nuevos fuegos de consecuencias graves.

Restricciones extraordinarias
En los municipios en “alarma extrema” situados en las provincias de León, Zamora y Palencia se aplicarán restricciones adicionales según lo dispuesto en la Orden FYM/510/2013, como son la prohibición absoluta del uso de ahumadores en actividades apícolas en monte y franja periurbana; suspensión de cualquier tipo de trabajo con maquinaria susceptible de generar fuego o chispas en el monte y 400 metros adyacentes; y prohibición de tránsito y estancia de personas y vehículos en montes, salvo para acceso a propiedades, actividades profesionales, actuaciones de emergencia o vigilancia.

Estas restricciones también contemplan excepciones para trabajos de reparación urgente de infraestructuras esenciales, siempre que hayan sido comunicados y autorizados por los servicios territoriales competentes. "Las empresas extremarán la precaución, contando con los medios necesarios para abordar la extinción de cualquier conato de incendio que se pudiera producir a consecuencia de su actividad", especifica la resolución.

La Junta insiste en la necesidad de prudencia por parte de la población ante una situación de riesgo elevado. Se recuerda que debe notificarse de inmediato cualquier indicio de incendio al teléfono de emergencias 112.