El grupo y su identidad nacen de las ganas de crear un proyecto artístico bajo el lema: “No hay diferencias, hay ilusión”, pues los músicos se llevan casi 30 años de diferencia. "Lo nuestro es una propuesta musical donde la edad no es distancia, sino lenguaje”, explica Francisco González, el veterano del grupo.

Su trayectoria ha empezado con su primera canción 'Besos, tequila y alcohol’ para darse a conocer, y actualmente están terminando el próximo tema, muy alegre y movido, para presentarlo en el festival Benidorm Fest. “Quisimos sacar el tema antes, pero por confidencialidad con el evento tenemos que esperar a octubre o noviembre, cuando sepamos quién irá a Eurovisión”, ha añadido Mario. “La canción para el festival será una especie de crítica a esas personas que, con aires de superioridad, generan malestar a otros", en lo que es un tema ligeramente autobiográfico por parte del joven cantante y sus vivencias en el colegio.

Su estilo es una propuesta musical novedosa: una fusión entre el techno y el rock, con guitarras, loops, ritmos potentes, y con letras directas y poéticas. Mezclando sonidos de ambos estilos con sintetizadores más rockeros, lo que lo hace distinguirse en la industria musical. Su mayor proyecto hasta la fecha será la gira de su próximo disco, del cual no tienen claro el nombre aún, que realizarán por el territorio español.

La música que hacen supone para ellos "una esperanza, ilusión, liberación, refugio e identidad". Y los conceptos en los que se basan son "la edad como escenario, la juventud como fuego y la madurez como raíz". Un grupo que utiliza sus diferencias como motor creativo.