Este sindicato, que ha lamentado la muerte del bombero forestal de 58 años que se dirigía a participar en las labores de extinción del fuego del Barranco de las Cinco Villas, ha pedido a la Administración autonómica que "no minore, ni abandone su compromiso, ni la gestión forestal del patrimonio forestal, como ya sucedió en 2022" y que en su opinión "ahora se repite en Ávila".

Además, ha reprochado a la Junta que "rehúya la necesidad de implementar una mayor partida presupuestaria en la prevención de los mismos durante los meses de invierno y no sólo limitarse a tareas de extinción en los meses de verano con el fuego encima".

Por otra parte, cree que "no hay que permitir el incumplimiento de esas falsas promesas" realizadas por el consejero de Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, después de los incendios de hace tres años en la provincia de Zamora, tras los cuales "se comprometió a estabilizar a los 4.554 trabajadores del operativo en cuestión y a convertir al 100 por cien de la plantilla de los fijos discontinuos, empleados en dicho dispositivo del ámbito público, en operarios con contrato fijo y estable y durante todo el año".

Esa promesa incluía "un cambio radical en la estrategia y planificación del operativo de bomberos forestales", que  a juicio de CGT, no se está produciendo, ya que "se sigue observando que continúan manteniéndose con contratos temporales de nueve, seis o incluso, de sólo cuatro meses".

Escasa experiencia

Por otra parte, denuncia que "en muchos casos" se llega a incorporar a personal "con escasa experiencia en el terreno", algo que en su opinión "pone en peligro sus vidas", mientras que "no se afronta el necesario cambio radical en cuanto a la gestión forestal".

Igualmente, denuncia el hecho de que se continúe "sin prestar atención en la necesaria labor de limpieza de los montes en las zonas que puedan tener potencialmente riesgo de incendios", que siguen ardiendo, como en el  sur de Ávila.

Además, critica la sustitución por cámaras de "personas óptimamente formadas en las torres de vigilancia y detección de incendios", lo que a su juicio "evita ese factor clave, como es la detección temprana de los incendios, imprescindible a la hora de combatirlos de manera efectiva desde su inicio".

Este sindicato exige que el operativo esté compuesto "al 100%" por personal público y permanente, lo que, aparte de servir para "homogeneizar su composición", contribuiría a "mejorar las condiciones infrahumanas que se imponen a los trabajadores de las empresas privadas contratadas por la Junta".