El Consistorio cucharero se queda sin representación de los populares, donde gobierna con mayoría absoluta Nuestra Tierra con cinco de los siete concejales de la corporación municipal.

El portavoz, Raúl Bardera, ha hablado de “discrepancias” y “por la manera de actuar del partido” a pesar de llevar bastantes años como edil. “Hemos tenido que tomar esta decisión de irme grupo no adscrito”, ha explicado.

“No sé qué procedimientos tienen cuando los invitan a echar pregones” de las fiestas, porque el año pasado lo dio Carlos García, presidente de la Diputación y del PP provincial, y este año el delegado territorial de la Junta, José Francisco Hernández. A este “cuando ocurrió el incendio de Pedro Bernardo”, el alcalde, David Segovia, “le puso como un trapo y caer de un burro, a la Junta y a todo el mundo, y ahora vienen a echar el pregón”, ha lamentado, para asegurar que “son cosas que no se entienden”.

Bardera ha indicado que no dimite y sigue como edil: “no me voy de concejal porque yo seguiré luchando por mi pueblo y haciendo las cosas como creo que siempre me ha gustado hacerlas bien”.

“He tratado de evitar a toda costa esta decisión -ha añadido-, pero finalmente, y tras darnos cuenta de que el Partido Popular es exactamente igual que cualquier otro partido de la política española, no nos ha quedado más remedio que abandonar el partido y pasar a ser concejales no adscritos”.

Bardera, que califica la situación como “una decepción”, ha deseado a los dirigentes del PP “toda la suerte del mundo”, porque “tal y como actúan, la van a necesitar”.