El objetivo es facilitar su incorporación al mercado laboral mediante formación especializada, acompañamiento profesional y contacto directo con empresas.

Las participantes abulenses tienen entre 23 y 45 años y presentan una diversidad formativa y profesional significativa: desde titulaciones de ESO y Formación Profesional hasta grados universitarios, con experiencia en sectores como la hostelería, la logística, la atención al cliente, la limpieza, la administración o el diseño gráfico. Todas ellas comparten una situación de especial vulnerabilidad y están en paro.

Programa consolidado
Pemcyl este año su décima edición. Desde su lanzamiento, ha atendido a 2.323 mujeres en toda Castilla y León, logrando que más del 57% mejorara su situación laboral: 1.046 consiguieron un empleo por cuenta ajena, 16 emprendieron un negocio propio y 266 ampliaron su formación mediante certificados de profesionalidad. El pasado año, la tasa de éxito alcanzó el 78%.

Esta nueva ronda de Pemcyl, en la que participan 84 mujeres de las provincias de Ávila, Burgos, León, Palencia, Segovia y Valladolid, llegará posteriormente a Salamanca, Soria y Zamora, con la previsión de alcanzar un mínimo de 119 beneficiarias.

El itinerario de formación incluye contenidos técnicos orientados a sectores con alta demanda laboral como la atención al cliente en comercios y el cuidado de personas mayores. Además, se promueve el acceso a profesiones STEM, tradicionalmente menos accesibles para mujeres en situación de vulnerabilidad.

Competencias digitales

Las participantes también reciben apoyo en competencias digitales básicas para la búsqueda de empleo, con la obtención de un certificado al finalizar. Se incluye también un módulo de bienestar emocional para reforzar la salud mental, clave en contextos de desempleo prolongado.

Durante los próximos meses, el equipo técnico de la Fundación Santa María la Real acompañará a las participantes mediante sesiones grupales e individuales centradas en el autoconocimiento, la definición de objetivos profesionales, la mejora del currículum, la preparación de entrevistas, el análisis del mercado laboral y el contacto directo con empresas de su entorno.

Finalizado el itinerario, las mujeres podrán adherirse al ‘Plan Acompaña’, un servicio de seguimiento y asesoramiento posterior que busca mantener el vínculo con el tejido empresarial, apoyar a quienes ya han accedido al empleo y reforzar la inserción de quienes continúan en búsqueda activa.