El accidente, que se ha conocido por varios avisos a las 13,36 horas del sábado, ha activado el operativo de rescate coordinado por el Centro Coordinador de Emergencias de Castilla y León.

La alerta se produjo tras varias llamadas de testigos al 112, informando de que la joven se encontraba con una fractura abierta de tibia y refugiada sobre una roca en el cauce del río. El gestor de emergencias activó una multiconferencia con Emergencias Sanitarias (Sacyl) y el Centro Coordinador de Emergencias, permitiendo una primera valoración clínica remota y la localización precisa de la víctima.

Desde Sacyl se indicó al alertante las actuaciones que debía realizar hasta la llegada de los equipos de rescate y, de forma paralela, el helicóptero de rescate fue movilizado con dos rescatadores a bordo, uno de ellos enfermero.

Difícil acceso
Una vez establecido el contacto visual, los rescatadores descendieron mediante grúa hasta el lugar donde se encontraba la joven. Allí estabilizaron a la víctima, le realizaron unas primeras curas y le inmovilizaron la pierna para poder izarla a continuación hasta el helicóptero mediante maniobra de grúa doble con triángulo de evacuación.

El dispositivo de rescate contó también con la intervención de la Guardia Civil. El  helicóptero evacuó a la herida hasta Ramacastañas, punto acordado para el traspaso con los servicios sanitarios. Desde allí, la joven fue trasladada en una ambulancia de soporte vital básico hasta el hospital de Talavera de la Reina (Toledo) donde recibió atención médica.

Las cascadas del Pozo del Tío Felipe son un enclave frecuentado por senderistas y bañistas, aunque su acceso presenta riesgos debido a la orografía y la presencia de superficies resbaladizas.