En diciembre de 2024, el boxeo encontró su nuevo hogar en la ciudad gracias a la apertura de una escuela de boxeo Murallas Boxing Club, dirigido por Darío Muñoz del Saz y Mercedes González Blanco, dos jóvenes entusiastas del boxeo.

Él, boxeador y entrenador certificado, y ella, encargada de la gestión del centro, decidieron emprender este proyecto tras trasladarse desde la Sierra de Madrid y darse cuenta de que la capital carecía de una escuela de boxeo.

Más de una década de experiencia en el boxeo, Darío inició su camino en este deporte a los 16 años, combinando su formación académica con su pasión por el ring. Hoy, además de entrenar y competir, se dedica a transmitir sus conocimientos a sus alumnos con un enfoque técnico y humano.

Lo que diferencia a este centro de otros gimnasios es su dedicación exclusiva al boxeo y su ambiente familiar. “Aquí conozco el nombre de cada alumno, sus progresos y sus dificultades. Este lugar no es solo un gimnasio, es una pequeña familia”, asegura Darío.

Golpear sin ser golpeado

El método de enseñanza se basa en enseñar a golpear sin ser golpeado, trabajando tanto la técnica como la actitud. “Intento corregirles la técnica, pero también fomentar esa agresividad positiva, esas ganas de superarse”, explica.

El gimnasio ofrece clases para todas las edades y niveles, desde principiantes que buscan mejorar su forma física hasta aquellos que desean prepararse para competir. 

“Esto no es como jugar al fútbol, donde puedes pasar el balón a otro. Aquí estás tú contigo mismo, enfrentándote a tus propios límites. Eso es lo que intento transmitir a mis alumnos, sobre todo a los niños. Que aprendan que, si caen, solo ellos pueden decidir si se levantan o no”, reflexiona Darío.

La pareja que se encuentra al frente de la escuela de boxeo Murallas Boxing Club. situada en la calle Doctor Fleming 1 local 10, da las gracias a todos los alumnos que confían en ellos y por la oportunidad de que esta familia siga creciendo. La ventaja de este centro es que desde 35 euros al mes, se puede entrenar todos los días y las horas que quieran sin límite y sin reservar en ningún momento plaza.