“El Movimiento Scout Católico es un movimiento educativo de la Iglesia y parte del Movimiento Scout Mundial, que propone a la infancia y juventud ser protagonistas de su propio desarrollo”, ha explicado Francisco Jiménez, presidente de los scouts de Ávila. Su objetivo es “hacer mejores personas para esta sociedad que tenemos en nuestro entorno”. 

En Ávila, el escultismo cuenta con dos grupos principales: el Grupo Scout San Antonio, fundado en 1990, y el Grupo Scout Gredos, creado en 2020. “San Antonio tiene su sede en la parroquia de la Sagrada Familia y reúne a unos 50 miembros, mientras que el Grupo Scout Gredos, ubicado en La Milagrosa, cuenta con unos 40”, ha detallado Jiménez. Ambos organizan actividades semanales dirigidas a niños, adolescentes y adultos jóvenes, estructurados en distintas ramas según la edad. “También tenemos una tercera rama, la agrupación ruta, formada por mayores de 18 años que, aunque siguen aprendiendo, ya son más independientes”, ha añadido.

La Asociación Scout Ávila, constituida en paralelo al Grupo Scout Gredos, se encarga de la coordinación de ambos grupos en la provincia. “Nosotros coordinamos las actividades y todo lo relacionado con los grupos, para trasladarlo a los organismos del escultismo en Castilla y León”, ha señalado el presidente. Además, el movimiento en Ávila está integrado en la Federación de Escultismo de España y en la Organización Mundial del Movimiento Scout, lo que les conecta con la comunidad global de scouts.

Juan Gomeño, sacerdote y consiliario de los Scouts de Ávila, ha explicado “Aunque el Movimiento Scout Católico comenzó en 1961, en Ávila ha habido scouts desde 1910 o 1912”. Gomeño acompaña a los scouts en el ámbito de la fe, recordando que “el escultismo tiene una base cristiana evidente” y que su fundador, Baden Powell, defendía que la fe estaba presente en todos los aspectos del movimiento.

La Asociación Scout Ávila está formada por distintos responsable, Gonzalo Rodríguez actúa como secretario y responsable de formación, Blanca Martín se encarga de conectar el proyecto educativo con los grupos locales, y Teresa Sánchez gestiona la tesorería.

En cuanto a la financiación, el movimiento scout cuenta con distintos recursos para desarrollar sus actividades. “Los grupos scout no dejan de ser asociaciones que manejan subvenciones y fondos para campamentos y otros proyectos, por lo que la gestión económica es fundamental”, ha afirmado Gomeño.

David Sanz, animador de fe del movimiento scout en Ávila, ha destacado la importancia de la celebración del Día de los Fundadores del Escultismo, que tendrá lugar el 22 de febrero. “Queremos anunciar e invitarles a participar en un evento muy importante para nosotros, que es la celebración del Día de los Fundadores, Baden Powell y su mujer, Olave Powell, que, justamente, ambos nacieron un 22 de febrero”. Para conmemorar la fecha, los scouts de la ciudad se reunirán en la explanada de los Cuatro Postes, que se iluminarán de morado, el color representativo del movimiento. “Es un color tradicionalmente asociado a la sabiduría, la dignidad y la creatividad, y ha sido elegido por los scouts para simbolizarse”, ha añadido.  

El evento, que se desarrollará este sabdentre las 19:30 y las 20:30 horas, incluirá testimonios, juegos organizados por los niños y la lectura de un manifiesto en el que los jóvenes compartirán su visión sobre el escultismo y la figura de Baden Powell. “También queremos conectar con los scouts de Ávila que han pertenecido a agrupaciones anteriores y recordarles que, como decimos siempre, ‘una vez scout, scout para siempre’”, ha afirmado Sanz. Bajo el lema “Fuiste scout, únete a la celebración”, la jornada busca reunir a todas las generaciones de scouts de la ciudad.