Por segundo año consecutivo, el diseño ha estado a cargo del estudio de diseño gráfico Doce Leguas, con sede en Valladolid y vínculos con Serranillos. La obra quiere plasmar la esencia y el carácter de esta celebración.

El cartel destaca por su fusión de arte y tradición, reflejando la riqueza cultural y etnobotánica de Hoyocasero por su pinar centenario y los monterones, en referencia a la flor alpina que florece en primavera, según el estudio de diseño. Además, el diseño rinde homenaje a las danzas de paloteo, una de las señas de identidad de la mascarada, representándolas en un ambiente lleno de color y movimiento al ritmo de la gaitilla y el tamboril.

La presentación del cartel ha entusiasmado al grupo de coros y danzas de Hoyocasero, pese a no haber tenido contacto previo con la diseñadora. El diseño también representa un tributo a aquellos que han formado parte de esta tradición y que ya no están, especialmente como homenaje a una compañera fallecida prematuramente, cuya hija aparece reflejada en el cartel como símbolo de continuidad y recuerdo.