La protesta responde al rechazo del colectivo al anteproyecto de ley del Estatuto marco sanitario, el cual considera un menosprecio hacia su trabajo dentro del Sistema Nacional de Salud. Según denuncian los organizadores, el borrador del texto legal muestra una actitud de indiferencia hacia los técnicos superiores sanitarios, tratándolos como profesionales prescindibles.
 

"Las PCR y las imágenes diagnósticas de los pacientes aislados durante la pandemia de la Covid debieron realizarse por generación espontánea", ironizan en su comunicado, denunciando la falta de reconocimiento a su papel fundamental en la sanidad española.

Los técnicos recuerdan que, tras la gran manifestación del 5 de marzo de 2022 ante el Ministerio de Sanidad, no han obtenido avances significativos en sus reclamaciones. A pesar de la aprobación de dos Proposiciones No de Ley en el Congreso y varias reuniones con el ministerio, aseguran que la receptividad de las autoridades ha sido nula. Además, critican que la ministra de Sanidad haya recibido a todos los colegios profesionales del ámbito sanitario, excepto a los que representan a los técnicos superiores sanitarios.

El colectivo denuncia que el anteproyecto de ley mantiene una clasificación "clasista", excluyendo sus profesiones a la categoría de "oficios", en lugar de reconocerlas como titulaciones superiores sanitarias reguladas en la Educación Superior. 

Además, advierten que el Estatuto marco sanitario limitaría su desarrollo profesional, su autonomía y su responsabilidad dentro de la Unión Europea. También reclaman la reclasificación al grupo A2 de la función pública, en igualdad con sus compañeros europeos, ya que consideran insuficiente su inclusión en el grupo B, vigente desde hace 18 años.

Las protestas no terminarán hoy, los técnicos superiores sanitarios han anunciado nuevas concentraciones en los hospitales de toda España los días 20 y 25 de febrero, 6 y 18 de marzo, y 3 de abril. Además, planean otra manifestación frente al Ministerio de Sanidad, con fecha aún por determinar.