La renovación del sistema de recogida de residuos ha supuesto la colocación de nuevos contenedores de mayor capacidad, lo que ha llevado a una disminución del número total de recipientes en la ciudad. Como consecuencia, algunos vecinos han manifestado su descontento porque ahora deben recorrer mayores distancias para depositar sus residuos.

Pero también ha generado quejas como la de calle Covachuelas. Algunos residentes de la zona han expresado su malestar por la pérdida de cuatro plazas de aparcamiento, debido a la ubicación de los nuevos contenedores en el lateral derecho del edificio del Centro de Educación Permanente de Adultos.