Ávila y Castilla y León consolidan su posición como referentes del turismo rural en España, según ha dicho García durante una reunión con representantes del sector. En este encuentro ha hablado de un ambicioso plan para apoyar el turismo rural y de interior, centrado en medidas estratégicas y en la derogación del controvertido Real Decreto 933/2021.

En su intervención, García subrayó que tanto Castilla y León como Ávila han mostrado un crecimiento significativo en el ámbito del turismo rural, impulsado por el esfuerzo de pequeños empresarios y emprendedores locales. La Comunidad ha registrado un aumento del 25,2 % en el número de viajeros, alcanzando un total de 66.003 visitantes, mientras que las pernoctaciones subieron un 21,4 %, recuperando el primer lugar a nivel nacional.

En el caso de Ávila, los números son aún más alentadores. Las pernoctaciones en la provincia aumentaron un 36,2 %, alcanzando las 22.721, y el número de viajeros creció un 19,3 %. "Estos resultados son el reflejo del esfuerzo de quienes trabajan día a día para ofrecer experiencias únicas en el ámbito rural, pero el mérito no está en las políticas del Gobierno central", ha señalado la senadora.

Gran Hermano turístico

Uno de los puntos centrales del plan presentado por el PP es la derogación del Real Decreto 933/2021, que ha denominado “el Gran Hermano turístico". Este reglamento fue criticado por García, quien afirmó que "demuestra el absoluto desconocimiento del Gobierno de la operativa turística y afecta a los derechos fundamentales de los turistas".

Según la portavoz del PP en el Senado, la normativa representa una carga adicional para los empresarios del turismo rural, reduciendo la competitividad de un sector clave para la economía de las zonas rurales. "El Gobierno del PSOE está tan alejado de la realidad que prioriza sus intereses políticos sobre el bienestar de un sector imprescindible para la España rural", ha asegurado.

El Partido Popular apuesta por un plan integral que permita trazar una estrategia coherente para el desarrollo del turismo rural en Castilla y León y Ávila, que incluya  incentivos para pequeños empresarios, el fortalecimiento de infraestructuras y la promoción de destinos rurales como pilares fundamentales para atraer visitantes y generar empleo.

En la reunión, que contó con la participación de Daniel Pérez, presidente de la Asociación de Turismo Rural de Ávila (ATRA), y Ángel Carreras, presidente de la Federación de Turismo Rural de Castilla y León, los asistentes coincidieron en la necesidad de un enfoque coordinado para superar desafíos estructurales y normativos.
García destacó el papel de Ávila como ejemplo de resiliencia en el turismo rural, que “tiene la capacidad de revitalizar y diversificar la economía local, pero necesita apoyo para alcanzar su verdadero potencial”.