Una ceremonia amenizada por la coral del Instituto Isabel de Castilla, en la que ha participado el consejero de la Presidencia de la Junta, Miguel González Gago, junto al delegado territorial, José Francisco Hernández Herrero y directora general de Atención al Ciudadano, Sonsoles Sánchez Reyes, que han entregado placas y reconocimientos conmemorativos a los 45 ya extrabajadores de la administración regional que han participado en el acto. 

En nombre de los homenajeados, han dedicado unas palabras María Luisa Vergel, enfermera en el área de salud mental del Hospital Provincial, y Francisco Javier Muñoz Retuerce, exjefe de la Oficina Territorial de Trabajo en Ávila. 

María Luisa Vergel pone fin a 42 años de servicio entre la Diputación y el Hospital Provincial de Ávila, por lo que no ha podido ocultar su alegría por la nueva etapa que se abre en su vida: “Llevo muchísimos años en la administración y la verdad que estoy muy contenta con la jubilación. No puedo decir otra cosa. La verdad que es una nueva etapa y de alguna manera hay que elaborarla. Cada uno tiene que elaborar su propia etapa de la jubilación”. 

Demanda de psiquiatras en Ávila

Aunque a preguntas de la prensa, ha reivindicado la falta de psiquiatras en el área de salud mental de Ávila: “Hemos estado mal este último año, nos han faltado psiquiatras y hemos tenido que trabajar muchísimo. Ahora parece que la cosa se ha ido calmando y estamos muchísimo mejor, pero siempre hemos sido la parte menos vista de la medicina y es la salud mental es muy importante para todo el mundo, porque teniendo salud mental, estamos todos bien. Es un buen bienestar social”.

Por su parte, Francisco Javier Muñoz Retuerce, exjefe de la Oficina Territorial de Trabajo en Ávila, ha puesto fin a 39 años en la administración pública, aunque a un total de 44 años de trayectoria laboral, al haber optado por una jubilación anticipada. Además, es partidario de dar paso a las nuevas generaciones: “Llega un momento en que hay que dar paso a gente nueva con nuevas ideas y que desarrollen el trabajo como lo hemos venido haciendo nosotros”. 

Muñoz ha manifestado “la satisfacción” de trabajar para el ciudadano que “al final te queda simplemente con que te den las gracias”. “Yo muchas veces les decía: no hace falta que me dé usted las gracias. Porque al final de mes, nos pagan con unos impuestos que paga ese ciudadano que en ese momento está contigo”, ha señalado Francisco Javier.  

"Perseverancia y tesón"

En este marco, el consejero ha agradecido el trabajo de los 6.600 empleados públicos que tiene la Junta de Castilla y León en la provincia de Ávila, “tanto a aquellos que llevan más años en la función pública, por su perseverancia y tesón; como a aquellos que últimamente han ingresado en la función pública autonómica, que siempre vienen con ilusión y sangre renovada”. 

Asimismo, ha recordado que “hay principios muy importantes que está bien que de vez en cuando recordemos”, puesto que “constituyen, a la vez, derechos de los empleados públicos, pero también obligaciones de cara a la ciudadanía”, como la integridad. Es decir, “separarse de aquellos asuntos en los que el empleado público personalmente pueda tener puede tener un conflicto de intereses de tipo empresarial o económico”. 

Pero también, la neutralidad política, la transparencia o la dedicación: “hay que realizar un especial esfuerzo, trabajar con tesón. Los empleados públicos debemos llegar a casa cansados. Al final se trata de que a la hora de comer podamos reconocer que el ciudadano nos ha pagado nuestro sueldo ese día y de verdad ha sido por un esfuerzo intenso en beneficio de la colectividad”.