El portavoz popular de la Comisión de Deportes municipal, David Gil, ha señalado que “la voracidad fiscal de por Ávlla llega también a la práctica deportiva en la ciudad”, desmintiendo a su juicio el dato que la teniente alcalde de Hacienda, Ángela García Almeida, dio en el pleno de octubre, cuando “intentó minorar el sablazo fiscal, asegurando que la subida de impuestos, tasas y tributos municipales iba a suponer 2,50 euros por familia al mes”.
 

En este sentido, considera “demostrado que, solamente con la subida del IBI se supera con creces esa cifra por cada hogar abulense, pero a esa repercusión de la subida del IBI hay que añadir muchos más conceptos, entre ellos lo que va a suponer el uso de las instalaciones deportivas por parte de las familias abulenses, de tal manera que nos tememos que muchos vecinos van a tener que renunciar a esas actividades o disminuir la frecuencia de uso de ellas".

"¿Esto es preocuparse por el día a día y la salud deportiva de los abulenses?", se pregunta el edil popular, antes de exponer un caso práctico para que los abulenses “comprendan el atraco de Por Ávila y Vox". 

Un ejemplo familiar

Al respecto, alude a una familia de cuatro miembros que vive en la zona norte de la ciudad. La madre va una vez a la semana a la piscina cubierta de la Ciudad Deportiva, lo que implicará un aumento de 2,60 euros al mes, sin olvidar que, debido a las obras en la piscina del  Complejo Sánchez Granado, se desplaza hasta la Ciudad Deportiva en autobús que, con una subida de las tarifas de este transporte supone cinco euros más al mes. 

El hijo, de 13 años, practica fútbol en el Sánchez Granado y, aunque es un deporte colectivo, el incremento de tasas repercutirá directamente en el aumento de la matrícula y las mensualidades, tanto el alquiler del campo, como la iluminación suben un 20%, por lo que la repercusión que tendrá que hacer el club para poder sobrevivir económicamente, será de uno cuatro euros al mes. 

Además, en época estival la familia va a la piscina de verano durante quince días y adquieren los bonos de acceso que, con el “sablazo de las ordenanzas”, subirán 20,30 euros.

"Es decir, a esta familia le va a suponer la práctica deportiva más de 14 euros al mes, por lo que queda al descubierto la gran mentira de los 2,5 euros por familia al mes de incremento”, ha argumentado Gil. 

Desde su punto de vista, “el 'sablazo' facilitado por Vox es muy superior y pone en riesgo la práctica de deportes para los abulenses”. "¿De qué vale tener instalaciones deportivas si se echan a los usuarios que tengan menos recursos económicos?”, ha añadido.Desde el Grupo Municipal del PP en el Ayuntamiento de Ávila se estará “atento” en la labor de oposición, sobre la repercusión que tenga, también en el ámbito deportivo, “esta nueva coalición de Gobierno”. 

"La supervivencia de los clubes y el ocio saludable se pone en peligro como consecuencia de la penosa gestión económica que ha demostrado el equipo de Gobierno en los últimos cinco años, ahora abrazado a su socio de Vox", concluye David Gil.