El vado creaba un elemento transversal de distorsión en la dinámica fluvial natural e impedía el remonte de las especies piscícolas de la zona.

Los trabajos han consistido en la eliminación de un vado sin circulación, que antiguamente daba servicio a infraestructuras que actualmente se encuentran en desuso. El vado formaba un elemento transversal constituido por varios tubos de hormigón de desagüe que impedía la “continuidad fluvial y generaban una alteración de la dinámica fluvial” del río Alberche.

La actuación finalizó con la retirada de todos los residuos generados a un vertedero autorizado, y se ha llevado a cabo dentro del contrato ‘Servicio técnico para actuaciones competencia de CHT en el dominio público hidráulico en cauces de la demarcación hidrográfica del Tajo’, que contempla una inversión global de ocho millones de euros.