Nieto ha participado, junto al magistrado de la Audiencia Nacional, José Ricardo de Prada, y al presidente de la Fundación Jesús Pereda, Ignacio Fernández, en la última de las mesas incluidas dentro de las II Jornadas sobre Memoria Democrática, organizadas desde el jueves en Ávila por la Fundación Jesús Pereda de CCOO y la Fundación Paz y Solidaridad Esteban Riera.

Entre el medio centenar de asistentes a estas jornadas celebradas en el Episcopio, se encontraba el fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz.

Nieto ha defendido la Ley de Memoria Democrática, al tiempo ha advertido del “serio problema” que a su juicio suponen “las tesis revisionistas y negacionistas” que “cogen fuerza en Europa”. “Es muy grave que las tesis negacionistas se instalen entre nosotros”, ha añadido.

Asimismo, ha planteado la posibilidad de que Ávila sea "un referente de la memoria democrática en España", dejando sobre la mesa la continuidad de unas jornadas por las que Ignacio Fernández hará “lo posible” para que sigan adelante, antes de abandonar, a principios de 2025, la presidencia de la fundación, tras ocho años.

El presidente de la fundación se ha referido a la misma como “paradógica”, ya que organiza unas jornadas sobre desaparecidos, al tiempo que tiene un programa denominado “debería desaparecer”, que hace referencia a la existencia aun de terminología franquista en las calles y plazas de España.

Leyes de concordia

El tercero de los intervinientes, el magistrado José Ricardo Prada, ha mostrado su preocupación porque las leyes de la concordia, impulsadas por algunas comunidades autónomas gobernadas en su momento por PP y Vox, "vacíen de contenido" la Ley de Memoria Democrática aprobada en 2022 por el Gobierno central.

De Prada, que es experto en Derecho Internacional, ha pronunciado una conferencia titulada 'La resistencia de la ciudadanía contra la desmemoria histórica. A propósito de la Ley de Memoria Democrática y de las leyes de la concordia'. Así, ha destacado la importancia de los "procesos de memorialización", que tratan de "satisfacer a las víctimas por la vía de la Justicia o de la reparación, probablemente, económica", sin olvidar también la "reparación moral del reconocimiento".

En esta línea, ha expresado su deseo de que en la memorialización hubiera "un contagio colectivo que hiciera que la sociedad se lo planteara de manera efectiva", ya que conforme "van pasando los años, la situación cada vez es más lejana".

Sobre las leyes de la concordia, impulsados desde varios gobiernos de coalición entre PP y Vox De Prada cree que "sí existe un consenso general de que hubo un golpe de Estado" en 1936, al que siguieron 40 años de dictadura.

"Lo que me preocupa de todas estas leyes de la concordia, es que vacíen de contenido la Ley de Memoria Democrática e introduzcan obstáculos y elementos de confusión, que perturben estos actos de memorialización", ha sostenido.