La intervención que se va a realizar permitirá el acondicionamiento de varios elementos de estas instalaciones, como la cristalera de la fachada sur, reparaciones en hormigones y sistemas de impermeabilización de las zonas de duchas tanto en la playa de la piscina como en los vestuarios o el sistema de impermeabilización en las plataformas de competición y podios. 

La “falta de mantenimiento en instalaciones deportivas, en este caso durante muchísimos años en esta ciudad, que no solo adolece a las piscinas, sino otras instalaciones; conlleva la pérdida de la funcionalidad de esos materiales”; ha justificado el portavoz del equipo de Gobierno, José Ramón Budiño, quien ha criticado los mandatos del PP, asegurando que “es una pena que durante muchos años se dedicasen solo a inaugurar, pero no a mantener”. 

“Cuando el uso no es el correcto, siempre hay algún tipo de peligro, de ahí que haya que acometer esa intervención, derivada de la falta de mantenimiento”, ha indicado el portavoz del equipo de Gobierno sobre el informe de los técnicos que advierten de daños en la cristalera que podría suponer un posible peligro para los usuarios. 

Cuatro meses de ejecución

Y es que los trabajos, que han salido a licitación con un precio base de 247.770,05 euros, IVA incluido, y un periodo de ejecución de cuatro meses; responden a actuaciones que se van a acometer para acondicionar una piscina que abrió sus puertas en el año 2002 y que presenta deficiencias provocadas por el paso del tiempo, la humedad y el ambiente de la instalación.

Durante este plazo, la nueva piscina cubierta de la zona sur dará cobertura a los usuarios: “Gracias también a la apertura de la nueva piscina que tenemos. Ese nuevo espacio para poder dar respuesta a esa demanda social, porque si hubiésemos actuado como otros equipos de Gobierno esperando a que se derrumbase la piscina, pues tendríamos tener un problema. Entonces, dentro de esa buena planificación, también nos permite acometer estas intervenciones”, ha indicado Budiño. 

La actuación se sumará a la que se ha venido realizando y ya ha finalizado en el vaso pequeño o de aprendizaje de la instalación, que han supuesto una inversión de 215.000 euros, ante los desperfectos que se habían detectado en el mismo y que ha obligado al cierre de las instalaciones durante cinco meses. 

Más de un millón de euros

Con estas intervenciones, se resuelven las deficiencias existentes y se garantiza la seguridad de los usuarios de una infraestructura en cuyo complejo se han realizado inversiones, en los últimos años, que han superado el millón de euros. Estas actuaciones han incluido la instalación de una nueva puerta corredera de acceso al recinto, el cerramiento de las pistas cubiertas, la reparación de las pistas de tenis exteriores, sustitución de césped artificial en el campo de fútbol Santiago Sanz o el cambio de luminarias, entre otras.

Para poder hacer frente a la mejora de las instalaciones en el Complejo Manuel Sánchez Granado, el portavoz del equipo de Gobierno ha detallado que “hay que buscarlo [el dinero] de otras partidas que tiene el Consistorio abulense”. Una valoración que “es más técnica que política”, según Budiño. 

“Entonces simplemente nosotros, desde el ámbito político, desarrollamos la gestión oportuna en base a esa notificación técnica que nos hacen, que no es la mejor circunstancia ni situación de la piscina para acometer los servicios públicos que en la misma se están desarrollando”, ha señalado el portavoz.