“Debido a los desequilibrios generados por la acciones humanas se ha puesto en peligro la satisfacción de las demandas sostenibles a medio y largo plazo”, explicó en la tercera charla -el jueves- de los 'Encuentros por una ciudadanía crítica'.

Economista y titulada en Estados Unidos sobre gestión hídrica, Hernández Mora lamentó los “numerosos incentivos políticos para forzar la privatización del agua”, en el que el 42 por ciento de habitantes recibe el abastecimiento mediante gestión privada.

También aludió a la “privatización de las fuentes para beneficio del agua embotellada” a pesar que la materia es gratuita “pues el agua es un bien público”, si bien el se ha disparado en los últimos años “con lo que han aumentado los impactos ambientales de todo tipo en las zonas de extracción”.

Fuente de vida
Hernández Mora propuso que, de cara al futuro, y con la premisa de que “el agua es fuente de vida y todos somos usuarios”, debe valorarse “siempre con criterios de sostenibilidad ambiental, eficiencia, racionalidad económica, transparencia y participación pública”.

Y se refirió a lo que denomina ‘meteoritos’, los “falsos y simuladores modelos de participación pública, que por desgracia abundan y donde siguen estando cerrados a los ciudadanos o donde solo se les permite opinar de los temas sencillos y no de los que deciden”.

También subrayó que la gestión del agua debe ser pública por ser “un derecho humano que vertebra paisajes y territorios, además de ser patrimonio común y fuente de producción”, y lamentó que “la mayoría de ríos están secos o contaminados a pesar de las normas y donde la aplicación de la Directiva Marco del Agua europea debe solucionarlo para el año 2015”, en una norma que establece en su comienzo que “el agua no es un bien comercial como los demás, sino un patrimonio que hay que defender y proteger”.

Acerca del calendario previsto de aplicación de la directiva, “a día de hoy” España tiene solo 14 planes de cuenca de los 25 previstos, por lo que “junto a Grecia y Dinamarca se encuentra entre los países incumplidores”.

La ponente fue presentada por Susana Curiel, alcaldesa de Navaescurial, uno de los pueblos afectados por la solicitud de Pascual para explotar manantiales del río Corneja. Hernández Mora apoyó al Movimiento en Defensa del Río Corneja y Alberche para “evitar el expolio del agua”.