Esta situación obliga a los trabajadores a manejar los paquetes de manera manual por las escaleras, con un peso de hasta una veintena de kilos.

El sindicato pide a la Inspección de Trabajo que actúe con urgencia y obligue a Correos a tomar las medidas necesarias, “para dar una solución inmediata a este problema que está poniendo en riesgo la salud de los trabajadores”.

CSIF apunta que la inhabilitación de los montacargas responde a una directiva nacional de la empresa, como respuesta a un accidente laboral mortal ocurrido en Sevilla, circunstancia que ha obligado a precintar los montacargas hasta que no se revisen, algo que todavía no se ha llevado a cabo.

Sin embargo, no poder utilizar el montacargas supone “un incremento severo del esfuerzo físico que deben realizar los empleados, ya que deben mover los paquetes por las escaleras”, lo que implica “un empeoramiento brusco de las condiciones laborales, y la elevación del riesgo de accidentes laborales, ya sea por el riesgo de caídas o de lesiones”. Además, remarcan que no ha habido una evaluación para determinar si todos los trabajadores pueden realizar esos nuevos esfuerzos físicos añadidos a sus funciones habituales del puesto.