Del Martes, 30 de Septiembre de 2025 al Sábado, 04 de Octubre de 2025
La Policía Nacional ha detenido en Ávila a los padres de un niño de 10 años huyó en solitario a Ávila desde Madrid en un tren, por sufrir, al igual que su hermana de 13 años, malos tratos habituales por parte de sus progenitores, que admitieron que era su "manera de educar".
Los dos progenitores son considerados supuestos responsables de un delito de malos tratos habituales, teniendo en cuenta que según han declarado los dos hermanos, solían ser agredidos "continuamente" con "el cinturón, con un cable del cargador y otros objetos cotidianos", algo admitido por la pareja
Los hechos se produjeron el lunes, cuando la Sala de Operaciones del 091 encargó a varios agentes dirigirse hacia la estación de ferrocarril de Ávila sobre las 1830 horas, después de que el revisor de uno de los trenes que se dirigía hacia la capital abulense señalara que en su interior viajaba un niño de 10 años, sin compañía y algo desorientado.
Por ello, varias patrullas de la Brigada Provincial de Seguridad Ciudadana acudieron a la estación y, cuando localizaron el tren y al menor, lo trasladaron a la Comisaría en un vehículo sin mampara.
Declaración de los niños
Una vez en las dependencias policiales, el menor dijo que se había escapado de casa, de una localidad de la la Comunidad de Madrid, porque sus padres le agredían "continuamente", junto a su hermana de 13 años, "con el cinturón, con un cable de cargador y con otros objetos cotidianos".
Ante esta declaración, desde la Comisaría de Policía se realizaron las gestiones necesarias para localizar a los progenitores, que finalmente se trasladaron desde Madrid para hacerse cargo de su hijo. Y viajaron acompañados de su otra hija, también menor de edad.
Los agentes de la Unidad de Atención a la Familia y Mujer (AFAM), de la Policía Judicial, se hicieron cargo de esta actuación. Durante la entrevista, la niña de 13 años relató de forma "espontánea" lo mismo que su hermano, afirmando que ambos son "golpeados frecuentemente cuando no se portan bien". Una versión que fue ratificada por los padres, diciendo que es "su manera de educar".
Por todo ello, la Policía Nacional contactó con la Fiscalía de Menores, cuyo titular determinó el ingreso de los menores en un centro de internamiento de la capital abulense, así como la detención de sus progenitores por un supuesto delito de malos tratos habituales.
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