En la última edición, se anunció que podría celebrarse a finales de junio, en vez de en septiembre como ha venido desarrollándose en los dos últimos años como consecuencia de los incendios. 

En 2023, el festival vendió la mitad de entradas menos y ya los empresarios defendieron la idea de que en 2024 se realizase en junio, puesto que septiembre “no son las fechas que recomiendan y las más aconsejables”, para “la ocupación hotelera y la atracción turística que tiene la zona de Gredos”, según ha manifestado el delegado territorial de la Junta. 

Por ello, desde la Junta de Castilla y León garantizan que en esta edición van “a ser sensibles con esas sugerencias que están realizando los máximos representantes del territorio, como son los alcaldes, e intentarán acomodarlo a una fecha en la que la demanda turística pueda compensarse con un evento de esas características”. 

Y es que, el festival “cuelga el cartel de completo, no solamente en cuanto a entradas”, sino también en cuanto a la ocupación de los alojamientos rurales, así como de los servicios de restauración que se ven beneficiados. 

De esta manera, “nunca sería más adelante” del verano, “porque la climatología en ese caso es adversa y especialmente a 1.500 metros de altitud como es Hoyos del Espino”, ha asegurado José Francisco Hernández. “En todo caso, de analizarse una fecha alternativa siempre es una fecha anterior” a septiembre.