Esos municipios son: Albornos, Viñegra de Moraña, Papatrigo, Narros de Saldueña, Crespos, Rivilla de Barajas, Flores de Ávila, Cisla, Cantiveros, Rasueros, Horcajo de las Torres, Pajares de Adaja y Madrigal de las Altas Torres.

Los informes de la situación de cada uno de ellos han sido recibidos por el diputado provincial de Cooperación Económica e Infraestructuras de la institución provincial, Félix Álvarez. Los consistorios informan de desperfectos de distinta consideración en infraestructuras y enseres.

Según Álvarez, se trata de "estragos muy significativos", que van desde la rotura de elementos de estaciones depuradoras, como ha ocurrido en la de Horcajo de las Torres, a daños en la captación del sondeo de agua de San Esteban de Zapardiel o la rotura de alcantarillado en distintos municipios.

También se han producido taponamientos de los drenajes de varias carreteras; desperfectos graves en caminos agrícolas; cultivos inundados; cabezas de ganado ahogadas; deterioro de mobiliario urbano; goteras en edificios públicos como la casa consistorial y el colegio de Flores de Ávila o en el pabellón municipal de Crespos y en el del colegio de Madrigal y grietas en el puente sobre el río Zapardiel, en Rivilla de Barajas.

Además, en Cisla, la fuerza del agua del río Zapardiel se ha llevado por delante el puente del principal acceso a la localidad y ha ocasionado daños en caminos, mientras que en Papatrigo los vecinos han permanecido diecinueve horas sin luz, además de seguir achicando este domingo agua en una veintena de viviendas. A ello se suman los desperfectos en ganaderías y, especialmente, en el campo, con los campos anegados.

Ante esta situación, el diputado ha trasladado a los alcaldes el "compromiso para trabajar conjuntamente y paliar la situación", además de insistir en la petición de declaración de zona gravemente afectada por emergencia de Protección Civil -zona catastrófica- que el presidente de la Diputación, Carlos García, ya ha anunciado que solicitará al Ejecutivo central.