De la mano de la Asociación Ecuestre de Amigos del Caballo de Ávila, la comitiva ecuestre ha partido de la explanada posterior al Lienzo Norte rumbo al lugar de la bendición, donde a las 14 horas han aparecido por el arco de la muralla., en una mañana de domingo buena temperatura.

En torno a un centenar de caballos han recibido la bendición de Fernando Gutiérrez, párroco de San Vicente, pero también los bueyes y equinos de tres carros y un enganche de la Real Cabaña de Carreteros de Gredos.

Los perros han predominado entre los animales a los que ha alcanzado las gotas del agua bendita, de todas las razas, tamaños y edades, pero también gatos, algunos en brazos y otros en sus transportines.

Cobayas y tortuga también has sido llevadas por sus propietarios, algunas en manos y en otras en sus terrarios e incluso, entre las palmas de un hombre, una paloma, como un pequeño portaba en una bolsa sus dos peces. Los dueños de las mascotas se mostraron emocionados de participar en esta tradición, una forma de agradecer a San Antón su protección sobre los animales.

La bendición de animales es una tradición que se remonta a la Edad Media, cuando los animales eran una parte esencial de la vida cotidiana, y eran considerados como seres vivos con alma, de ahí la importancia de pedir protección para ellos a su patrón.