Así figura en un manifiesto firmado por las juntas de Semana Santa de Ávila, Burgos, Briviesca, León, Ponferrada, Cuéllar, Salamanca, Zamora, Soria, Aranda de Duero, La Bañeza, Valladolid, Astorga, Benavente, Medina de Rioseco y Medina del Campo.

Según sostienen, “la Semana Santa de Castilla y León no sólo son los desfiles procesionales, tampoco son las tradiciones con más de 600 años de historia que año tras año se repiten; no es la salida masiva a las calles de los hermanos de las cofradías o de los miles y miles de espectadores que aguardan en las aceras”.

“Tampoco son las lágrimas de los portadores de los pasos, no es el esfuerzo de un componente de una banda por tocar melodías para acompañar a su Cristo”, sino que “es más que eso”, añaden.

Tradiciones
Desde su punto de vista, “es el esfuerzo de los abuelos, padres y madres para que sus hijos participen en las procesiones para mantener esas tradiciones ancestrales”, además de “sentimientos, emociones, contenidas o no, convivencia con amigos, con familia, con hermanos”, sin olvidar que “tiene su lado económico y lógicamente supone para la Comunidad una importante inyección de recursos”.

Por ello, las juntas de Semana Santa de Castilla y León han manifestado su “malestar” por las decisiones que desde hace años se están tomando desde la Junta de Castilla y León con respecto a las fechas de las vacaciones escolares en torno a esta celebración y, en consecuencia, “el escaso apoyo que la Semana Santa recibe”.

Aunque el próximo año las vacaciones escolares se extenderán desde el Viernes de Dolores hasta el Lunes de Pascua, “no está garantizado que en años venideros los desfiles procesionales vuelvan a resentirse de la participación de los niños y también de los padres y madres de los mismos, ya que al día siguiente tendrán que madrugar para asistir al colegio”.

Protección
En opinión de las firmantes del manifiesto, “no se está protegiendo convenientemente la celebración popular más importante de toda Castilla y León”. No en vano, recuerdan, “en la Comunidad autónoma hay siete semanas santas declaradas de interés turístico internacional, tres de interés turístico nacional y doce de interés turístico regional”.

“¿Cómo se van a mantener los desfiles procesionales si no se permite que los niños, que son el futuro de las cofradías, participen en los mismos?” y “¿qué ocurrirá si, como parece, se declara el día de Jueves Sano como día laborable?”, se preguntan.

En este sentido piden “que se reflexione convenientemente sobre esta celebración religiosa y que se proteja adecuadamente”, ya que, a su juicio “debe ser tenida en cuenta la importante repercusión económica que esos días tienen para las ciudades y pueblos”. “No cabe duda que la llegada de visitantes de otras comunidades es muy importante, pero tanto más lo es, los movimientos de los castellanos y leoneses por las diferentes celebraciones de la propia Comunidad y la repercusión económica que ello tiene en los lugares de destino”, reza el manifiesto.

Las juntas de Semana Santa hacen también un llamamiento a todas las instituciones, públicas y privadas, establecimientos hoteleros “y a quien corresponda”, para que la Semana Santa cuente “con más apoyo del que en estos momentos tiene y no solamente económico, sino de protección y difusión”.