El hecho ocurrió en la madrugada del domingo, a las 6,20 horas, cuando los agentes de la Policía Local acudieron a un accidente de tráfico que había ocurrido en la carretera de Burgohondo. Allí comprobaron que el conductor presentaba síntomas y un comportamiento que permitían razonablemente presumir que había conducido bajo la influencia de bebidas alcohólicas, siendo requerido para someterse a las pruebas de investigación de la alcoholemia.

La prueba arrojó una tasa de alcohol altamente positiva, por lo que se instruyó el correspondiente atestado por la posible comisión de un delito contra la seguridad vial.

Igualmente, se requirió al conductor, identificado como un vecino de la localidad segoviana de Ituero y Lama, de 22 años, que acreditara estar en posesión de la correspondiente autorización administrativa para conducir un vehículo a motor o ciclomotor y también la documentación del vehículo.

Realizadas las comprobaciones oportunas, se pudo constatar que el vehículo estaba circulando sin que constase que su propietario tuviera suscrito y en vigor un contrato de seguro que cubra la responsabilidad civil derivada de su circulación. 

Además, se comprobó que el conductor carecía de autorización administrativa válida para conducir, por no haber cumplido los requisitos administrativos exigidos reglamentariamente en España, pues no había realizado el curso de reeducación vial tras una suspensión temporal del Juzgado de lo Penal de Segovia.

Como consecuencia de todo ello, se procedió a formular las denuncias administrativas correspondientes al interesado, quedando inmovilizado el vehículo.