Ante estos hechos, puestos en conocimiento del Ayuntamiento del municipio por quien descubrió lo sucedido, el alcalde de la localidad, Adrián Sánchez, ha comunicado el hecho a Guardia Civil del puesto de Muñogalindo, antes de interponer la correspondiente denuncia, junto a alguno de los afectados.

La desaparición de las cruces, crucifijos y adornos fue descubierta el jueves por uno de los aproximadamente 20 vecinos de este barrio de Padiernos que, como es habitual por estas fechas, se acercó al camposanto para "preparar" las tumbas de sus seres queridos ante la festividad de Todos los Santos.

Al llegar se dio cuenta de que faltaban cruces de "entre 20 y 30 centímetros" y algún crucifijo de un metro de altura. En total, entre seis y siete sepulturas han sido las afectadas en este cementerio situado a unos 700 metros del casco urbano de Muñochas, que dista dos kilómetros de Padiernos.

Por el momento, se desconoce cuándo se pudo producir el robo, ya que al tratarse de un núcleo de población tan pequeño, el trasiego de gente es escaso, excepto en estos días próximos a la festividad de Todos los Santos. El camposanto de Muñochas no tiene horario de visita, puesto que la puerta está siempre abierta.

Según el regidor, la Guardia Civil le ha comentado que también se han producido hechos similares en otras localidades de la zona.

En este sentido, los trabajadores municipales han comprobado cómo en el cementerio de Baterna, anejo de Solosancho, se han producido actos vandálicos que hjan implicado la desaparición de crucifijos, cruces y otros elementos en, al menos, 13 sepulturas. Todo apunta a que este tipo de actos se han cometido en otros camposantos de la provincia.