“Nuestro posicionamiento es claramente en contra, no podemos estar de acuerdo con una subida tan fuerte de impuestos como la que plantea el Ayuntamiento de Ávila, porque va en contra de los intereses de los empresarios, que es lo que nosotros tenemos que defender”, en una situación en la que “no ha habido una subida de ingresos por parte de las empresas ni por parte de las familias que justifique que podamos afrontar con serenidad esta subida”.

Díez señala que un incremento impositivo “lastra la competitividad con los entornos”, porque “Segovia está al lado con unas medidas que no van en esa dirección, y en Madrid todos sabemos que la política que está siguiendo es reducción de impuestos, por lo cual no es una decisión que sea buena para Ávila y para la economía abulense”.
No hacer política

Recortes

Por otra parte, el presidente de la patronal ha instado al alcalde, Jesús Manuel Sánchez Cabrera, qué decida de dónde hay que recortar. “Nosotros no estamos aquí para hacer política” puesto que “la política la tienen que hacer los políticos, y en este caso el Ayuntamiento, son quienes tienen que racionalizar el gasto y buscar la eficiencia de sus recursos”.

“El presupuesto parece que está tenso, pero son los ellos que tienen que tomar las decisiones de dónde van a recortar su presupuesto, pero que no seamos las empresas quienes tengan decidir de donde recortar nuestro presupuesto, ni las familias que van a dejar de consumir en los negocios abulenses”, ha manifestado, instando al Ayuntamiento a que “tome decisiones y afronte ese problema desde la parte política”.

Decisiones que afectan

También el presidente de CEOE ha opinado sobre las manifestaciones del alcalde en las que afirmaba que las medidas municipales no afectan a la venta de los establecimientos comerciales, después de que la Asociación de Vecinos Arturo Duperier asegurase que una tienda de recambios de electrodomésticos iba a cerrar por el carril bici de la calle Agustín Rodríguez Sahagún, si bien lo ha aplicado a otro caso.

“Claro que afectan las decisiones del Ayuntamiento”, ha afirmado. “Si en un entorno en el que hay 70 plazas de aparcamiento y circulación de tráfico rodado deja de repente de haber esas 70 plazas y el tráfico rodado, si era una ventaja competitiva para los negocios que allí estaban, lo van a sufrir y terminarán perdiendo clientes, y por tanto acabarán cerrando o cambiando de actividad”, ha dicho en referencia, aunque sin citarlo, a las obras del barrio de la Toledana, en la avenida Juan Pablo II en su confluencia con la calle Nuestra Señora de Sonsoles.

“Puede llegar a afectar, y también positivamente, si se pone en valor una buena planificación urbanística y distintas zonas, si se pone en valor la ciudad, porque se anima a que la gente pueda emprender y ver como un lugar de inversión la ciudad de Ávila, que creo que también es posible”, ha añadido.