En el pleno de las Cortes, Pascual ha recordado que en Ávila, cuando se sufre un ictus, el diagnóstico y tratamiento "dependerán de la rapidez con la que lleguen los servicios de emergencias". Además, ha explicado que "si se determina el ingreso en una unidad de ictus, comienza el 'periplo' y hay que 'jugar con la suerte' porque los abulenses dependen, en estos casos, del transporte sanitario, terrestre o aéreo". "Todo eso es tiempo”, ha añadido. 

El procurador ha afirmado que “el cerebro es tiempo”, al tiempo que ha señalado que “todo esto juega en contra de los pacientes”, si bien ha precisado que “no de todos, ni en todas las provincias”, puesto que Ávila, junto con Soria, Palencia, Zamora y El Bierzo, sigue sin tener una unidad de ictus. 

Por todo ello, Pascual ha lamentado la "respuesta evasiva" del presidente de la Junta, antes de manifestar su voluntad de "seguir luchando para que los abulenses sean ciudadanos de primera” y "cuenten por fin con este servicio".