Una exposición compuesta por 275 obras con la que la escuela cierra el curso académico en la que se puede encontrar trabajaos realizados sobre óleo, lápiz o esculturas realizadas por alumnos con edades comprendidas entre los seis y los 18 años.

No es la única actividad que llevan a cabo desde escuela, pues el objetivo de los profesores que imparten estas clases es -en palabras de Raúl Mayo- añadir “un grano de arena” para que, de cara al futuro, puesto que “no solo intentan que salgan pintores o escultores, sino crear una sensibilidad sobre el arte para que, aunque muchos no se vayan a dedicar a las artes, pero sí puede llegar a ser nuevos mecenas o nuevos filántropos”.

Por otra parte, los alumnos han diseñado y ejecutado un mural de 50 metros cuadrados en el barrio anexionado de Narrillos de San Leonardo y que ha puesto a prueba su imaginación y habilidad.

Otras actividades

Como colofón este año, también realizarán una excursión a Cuenca para ver el Museo de Arte Abstracto y a Valencia. Salidas por España “enriquecedoras” para los alumnos, centradas en los museos contemporáneos y de arte clásico y que día tras día estamos sentidamente fomentando esa cultura y semanalmente entre los chavales. 

Por su parte, el concejal de cultura en funciones, Ángel Sánchez, ha defendido que la escuela ofrece un desarrollo a los estudiantes como el crecimiento y la imaginación, además de ser “una libertad” puesto que no son estudios obligatorios, sino que lo eligen ellos. Algo que conlleva “crecimiento en la libertad y la responsabilidad”, ha indicado Ángel Sánchez. 

Además, se ha hecho entrega de los trofeos a los alumnos que llevan más tiempo en la escuela: once alumnos que han recogido el "ojo en la pradera", símbolo de la escuela, que fue diseñado por un antiguo alumno y que este año ha estado impreso en 3D.