España es cuna de los mejores ejemplares de esta raza. Sus caballos emergen de una valiosa familia de ejemplares autóctonos que habitan en gran parte del territorio español desde hace milenios. Según el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, en España se lleva el registro de 20 razas autóctonas de equinos, 17 de las cuales son estrictamente razas de caballos y el resto razas de asnos. Asimismo, España destaca dentro de la Unión Europea por un censo elevado en su familia de perisodáctilos, compuesta en un 48% por animales de raza pura, aproximadamente.

Las razas de caballos españoles por hoy triunfan a lo largo del globo, incluyendo la meca del cine: Hollywood. Su elegancia en fisionomía y porte es fruto de años de experiencia en las artes de reproducción y crianza de los expertos de las yegüerías nacionales. Pero, más allá de eso, se trata de animales equilibrados, inteligentes y nobles, cualidades que facilitan su capacidad de aprendizaje y una simbiosis natural con el hombre. Para celebrar la riqueza y el legado cultural de estos majestuosos animales, lee más detalles sobre esta y otras razas populares en nuestro territorio o explora la tradición y la competencia en los torneos ecuestres más destacados de España.

1. Pura Raza Española

Plinio el Viejo, Séneca y Plutarco tenían al caballo de Hispania como un ejemplar ideal para la guerra y para los míticos juegos de circo en la Roma Antigua. Este ejemplar, el antepasado más lejano de la raza más afamada de caballos españoles, ha proseguido dejando su huella en la historia.

Siglos luego, el reinado de Felipe II, fue lograda la consolidación esta raza mediante la creación de las Caballerizas Reales de Córdoba. Aquí se reunió a los mejores sementales y yeguas de las provincias próximas al Guadalquivir. Si bien no hay una fecha exacta para determinar su aparición, esta raza se ha ido perfeccionando a lo largo de los siglos. La mayoría de las razas criadas en América y Centroeuropa son descendientes de esta, si bien la gran mayoría no son considerados de raza pura.

Actualmente, la población mundial de caballos de Pura Raza Española (PRE) registrada por el Libro Genealógico del PRE asciende a los 180.000 ejemplares, con un conteo repartido a lo largo de España y cincuenta otros países. Denominaciones como caballo andaluz o ibérico no representan al PRE, al ser caballos cruzados que carecen de los controles de calidad y pureza necesarios para ser parte de la documentación oficial del Libro Genealógico del PRE.

2. Asturcón

Esta es una raza autóctona, natural del Principado de Asturias, pero extendida a otras provincias de España. Se caracterizan por tener unas orejas pequeñas, perfil de la cabeza subcóncavo y las patas anteriores finas y proporcionadas. Se tienen referencias desde el año 80 A.C., mencionado en crónicas sobre las invasiones romanas. Muy resistente, con el manto color negro, castaño o alazán, su hábitat natural es la montaña. Lastimosamente, se encuentra en peligro de extinción.

3. Pura raza gallega

Se trata de otra raza autóctona de la que ya se tiene datos desde el siglo XV. Originaria de Galicia, su población se extiende por Lugo y Pontevedra. Poseen un cuello proporcionado, buena conformación y abundantes crines. Considerado un caballo muy rústico,  por su naturaleza y hábitat está acostumbrado a condiciones extremas.

4. Mallorquín

Dentro de las razas de caballos españoles, esta es una de las más antiguas que desciende de una variante de los primitivos equinos de la Península Ibérica. Una raza local de la isla balear asociado a tareas agrícolas, se le reconoce por su imponente capa de color negro y gran capacidad reproductiva. Actualmente quedan unos 150 ejemplares.

5. Pottoka o poni vasco

Esta raza se da con asiduidad en Euskadi y Navarra, remontándose probablemente al Paleolítico, tiempo desde el cual se piensa ha habitado la zona noroeste de España. Su belleza ha sido inmortalizada en numerosas pinturas rupestres de Europa del sur. De color castaño muy oscuro, este caballo destaca por su gran resistencia. En algunos enclaves, lastimosamente, ha sido cruzado con razas foráneas, poniendo en peligro su supervivencia.

6. Pura Raza Hispanoárabe

Esta raza surgió del cruce entre la pura raza árabe y la pura raza española, en el año de 1800. Ambos caballos de fuerza, porte e inteligencia, juntos dieron origen a una raza apta para trabajos que exigen precisión y resistencia, como la doma vaquera, doma clásica, salto, trabajo de campo, e incluso muchas tradiciones abulenses que están siendo celebradas en documentales recientes. Aunque es originario de Andalucía, pueden verse ejemplares por toda España.